En la actualidad las enfermedades por falta de concentración e hiperactividad abundan. Hace unos años nadie sabía de la existencia de éstas, pero en estos días, los tipos y grados de estas enfermedades asustan a los padres y los obligan a tomar medidas que para algunos, no siempre son las adecuadas. La exigencia en los colegios, la idea de que un niño debe comportarse como un adulto y, que debe cumplir con los estándares creados por la sociedad, los esta sometiendo a mucha presión. Tal vez sea por eso que pastillas como el "Ritalin" se han puesto de moda.
Para Armando Filomeno, graduado en medicina, fundador de la Universidad Cayetano Heredia y neurólogo asesor fundador de la Asociación Peruana de Déficit de Atención, son más los efectos positivos de ésta medicina que los negativos. El cree que la medicación debe ser acompañada con un tratamiento y sólo ser usada en casos necesarios. En su libro, “El niño con déficit de atención, cómo pasar del fracaso al éxito” comenta los aspectos positivos, negativos, los mitos y los tratamientos necesarios para lograr una mejora. En su libro declara: “El Ritalin se consigue desde el 2007 en nuestro país y ha mostrado ser efectivo en los niños con hiperactividad y déficit de atención. Además esta comprobado que no produce adicción, ya que entra lentamente en el cerebro y es eliminado del cuerpo más despacio aun. Algunos de sus efectos son la disminución del apetito, puede causar falta de sueno y dolor de cabeza y abdominal si las dosis son muy altas. El pulso puede acelerarse y puede haber un aumento de la presión arterial”. Sin embargo, con respecto a la adicción, en las precauciones y advertencias del producto se menciona:” La utilización abusiva y crónica de RITALINA® puede engendrar una marcada tolerancia y dependencia psíquica con grados variables de trastorno conductual. Tal vez se produzcan episodios psicóticos manifiestos, especialmente con el uso abusivo del fármaco por vía parenteral". Además,
advierte que se han notificado casos de muerte súbita en asociación con el uso de estimulantes del Sistema Nervioso Central a las dosis usuales en niños con anomalías cardíacas estructurales. Por lo tanto, como regla general, no se
deben utilizar productos estimulantes en pacientes que presentan anomalías cardíacas estructurales.
En adición, Filomeno comenta que existen algunos mitos sobre el TDAH, por ejemplo que no se trata de la enfermedad, sino de una crianza inadecuada o que es simplemente un niño malcriado o que un niño así debe asistir a un colegio especializado. Ninguno de esos mitos es cierto. Es hora de conocer este trastorno, comprenderlo y encontrar soluciones para el.
El debate entre Rafo LEÓN Y La Asociación de Promotoras de Educación Inicial del Perú
Hace unos meses el periodista Rafo León, reconocido por sus crónicas y su programa Tiempo de viaje en el cable, publicó un articulo sobre el Ritalin y el Rivotril. Lo llamo:”Ritalin y Rivotril: la felicidad infantil”. En este articulo, que generó un debate entre el APEIC (asociación de promotoras de educación inicial del Perú) y el mencionado periodista, él entrevista a una profesora de kinder de un colegio prestigioso de la ciudad. Esto fue lo que contó el periodista luego de la entrevista: “Alicia está bastante aterrada. En el kinder tiene una cincuentena de niños entre los dos y los cuatro años. Me asegura que más de la mitad está en tratamiento con Ritalin, el famoso metilfenidato que psiquiatras y neurólogos recetan como quien vende lentejitas de D’onofrio, para controlar el trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH)”. Al leer estas declaraciones las integrantes del APEIC se sintieron indignadas. Fue así que enviaron una respuesta a la revista Somos, que fue la que publicó el articulo, con una relación de los niños con déficit de atención y el numero que era medicado adjunta. Las cifras arrojadas fueron las siguientes: En un total de veintitrés nidos, que en conjunto cuentan con mil treinta y nueve alumnos, solo tres habían sido diagnosticados con el TDAH (Trastorno De déficit de atención con hiperactividad) y ninguno de ellos estaba siendo medicado. Esta respuesta de los nidos nos lleva a pensar que probablemente uno de los factores para el consumo de esta medicina, empiece cuando deben dar el examen de ingreso y les exigen mucho más de lo que se debería para tan corta edad.
En el reportaje de Rafo León se menciona lo siguiente: “las maestras de los nidos también están felices con el medicamento porque así el establecimiento puede recibir mayor cantidad de matriculados ya que cuando están dopados resultan más manejables”.
Además dice que cuando el niño realmente tiene un problema no hay otro método que tenga un resultado igual de eficiente que el Ritalin. Rafo León expresa que con el Ritalin el chico está sedado, tranquilo, aparentemente atiende, no hace bulla, no se mueve. Mientras que Ana María Chocano piensa que hay que ponernos en la otra postura también. Los niños con este problema suelen pelearse con otros niños, golpearse con mayor facilidad y no obedecen en lo absoluto y eso puede llegar a ser muy frustrante para los padres.
Opinión de una experta
“Es necesario que el niño tenga una terapia complementaria al tratamiento farmacéutico para que haya un buen resultado”, comenta Guiomar Du Bois, educadora inicial y pedagoga, especialista en niños con déficit de atención. También afirmó que el Ritalin es necesario cuando el déficit de atención es muy agudo.
Existen varios tipos de terapia, entre las mas conocidas están: La terapia conductual, que consiste en que el niño este ocupado, sobretodo con lecturas, y que entienda que su comportamiento va a generar consecuencias positivas y negativas. El coaching, es otra terapia, ésta consiste en ayudar al niño a organizarse, a entender el trastorno que tiene y tratar de corregir las fallas en su comportamiento. Esta terapia es buena para la madre que actúa como apoyo y puede seguir su ritmo de vida. Además es necesaria una terapia de lenguaje y aprendizaje para que los niños logren expresar sus emociones con claridad. Du Bois también advierte que el tratamiento con Ritalin no es el indicado en todos los casos, por ejemplo en caso de un niño con epilepsia estaría totalmente restringido. Además, asegura que se debe hacer una evaluación detallada para determinar la intensidad de los síntomas, que no se debe prescribir sólo al encontrar uno de ellos, porque puede estar presente por otras razones.
Si es que no esta seguro de que su hijo tenga este trastorno, le damos algunos consejos que lo llevaran a ver todo con más claridad. Si las tareas escolares toman más tiempo y necesitan constante apoyo, si ve que su hijo se siente insatisfecho con los resultados de su esfuerzo y recibe llamadas de atención constantes y tiene conflictos con los compañeros es probable que pueda tratarse del TDAH, pero no debe tratarse sin supervisión médica.
Las investigaciones no terminan
El "children and adults with attention deficit/hyperactivity disorder" emitió un pronunciamiento en el 2006 con respecto a las consecuencias de estos medicamentos. Esto fue lo que se dijo: “la recomendación del comité de incluir advertencias sobre riesgos cardiovasculares raros y no demostrados, es prematura en el mejor de los casos y podría alarmar innecesariamente a pacientes clínicos. Sin embargo, estamos totalmente de acuerdo con la necesidad de hacer más investigaciones. Según Novartis Biosciences Perú, empresa líder en importación y exportación de productos farmacéuticos, no se conocen en detalle los perfiles de eficacia y de inocuidad a largo plazo de Ritalina. Por lo tanto aclaran lo siguiente: “los pacientes que necesitan terapia a largo plazo deben ser supervisados con cuidado y es preciso efectuar recuentos sanguíneos completos, fórmulas leucocíticas y recuentos de trombocitos de forma periódica. También, es necesaria una supervisión cuidadosa durante la retirada del fármaco, pues ello puede desvelar depresiones, así como los efectos de la hiperactividad crónica. Algunos pacientes tal vez necesiten un seguimiento a largo plazo”. Esta farmacéutica también menciona que se han dado situaciones de una reducción moderada del aumento de peso y de un leve retraso del crecimiento en niños que recibieron estimulantes por tiempo prolongado, pero no se ha podido establecer ninguna relación causal y que hay que proceder con cautela si el paciente es emocionalmente inestable, como pueden ser aquellos que presentan antecedentes de drogadicción o de alcoholismo, pues estos pacientes pueden aumentar la dosis por su cuenta.
Podemos ver que las posturas están divididas, pero lo que debe tener en cuenta si es que nota más de uno de lo síntomas mencionados, es que debe consultar a un profesional antes de medicar a su niño. Las consecuencias de la medicación sin orden de un especialista son graves y los niños no tienen porque sufrir las consecuencias de la irresponsabilidad de los adultos.